dimarts, 3 de desembre del 2013

Un aire fresco y abrasador acaricia mi piel de porcelana como si no hubiese un nuevo día, las nubes se juntan ante mí como si estuviesen apunto de darme un buen escarmiento por algo que no he hecho bien...

Las estrellas me guiñan el ojo contentas por estar allí arriba y no tener que soportar todo lo que yo aquí en este mundo lleno de injusticias y maldades. Si estuviese en mi mano haría lo posible por que toda esa oscuridad que me corroe por dentro desapareciese, que todos esos pensamientos de maldad abandonasen mi cuerpo, mi mente...

Cierro los ojos para escuchar a mi alrededor, la brisa chocando sobre las rocas, la hierba, los árboles meciéndose, empujándome hacia el vacío... ¿es eso lo que tengo que hacer? ¿rendirme al vacío?
Eso es lo que les gustaría, pero algo en mí, me dice que siga luchando, que siga en pie intentando una y otra vez todo aquello por lo que vine, que por muchas veces que me caiga me levante, aunque necesite un largo período de tiempo...

Lo importante es que al final me levante.