Ha pasado por mucho, ha visto cosas que nunca se deberían sacar a la luz y aún así se mantiene en pie, firme, recomponiendo los fragmentos de su alma desgarrada por esta sociedad de incomprensiones y prejuicios, esta sociedad en la que no hay cabida para alguien como él...

No es nadie y es el todo, su máscara es capaz de esconderlo de todo el mundo, esta solo en él... aunque llegados a este punto tampoco necesita a nadie, solamente confía en él mismo...

Algunos pensaréis que es triste, querríais incluso conocerlo, pensar que podríais tener algo en común con este ser, pero creed que no es así ya que la gente que consigue ver esa máscara blanca de ojos negro que traspasarían el mismísimo infierno no consigue ver la luz de un nuevo día.

Un alma no se puede arreglar sola, necesita piezas nuevas, piezas con las que recomponer la vieja hasta encontrar una mucho mejor, más lúcida, más grande, más sedienta de sangre...

Aquellos que consiguen verlo caen en un mundo del que ya no despertarán, se sumen en la desesperación de no saber como han llegado hasta allí, ni siquiera de no saber porque no recuerdan quienes son, se sienten vacíos pues son meros recipientes humanos vagando por el mundo sin rumbo alguno.

Esperando respuestas...
Esperando que ocurra algo que les arroje un poco de luz en la oscuridad que están sumidos....
Esperando a su propio Cazador de Almas atormentadas...
Esperando que algún día aquel que les ha arrebatado aquello tan preciado se lo devuelva...
Esperando al Cazador de almas...